miércoles, 15 de abril de 2009

Las palabras extranjeras

Entre las palabras extranjeras que se han ido incorporando a nuestra lengua recordamos el vocablo de origen inglés, esnob, adaptado, más o menos, a la grafía y sonido del español; aunque todavía queden muchos hispanohablantes e hispano-escribientes que siguen empeñándose en decir y escribir “snob”, manteniendo la forma original inglesa.
La palabra esnob se aplica a “la persona que imita con afectación las opiniones o maneras de aquellos a quienes considera distinguidos”.
A decir verdad, no dejan de parecer ridículos los individuos que practican el esnobismo. Y estoy segura de que se borrarían de tal práctica si conocieran el origen de la palabra. Se lo cuento.
Parece ser que en tiempos pasados, los jóvenes que acudían a estudiar a la Universidad de Oxford eran, por lo general, vástagos de familias de alta alcurnia.
En el momento de inscribirlos en el registro de la Universidad, cuya inscripción se hacía en latín, escribían junto a sus nombres, los de sus padres con sus respectivos títulos de nobleza; pero, si la familia del educando no poseía títulos nobiliarios, se hacía constar con las palabras latinas “sine nobilitate” (sin nobleza), abreviadas así: “s. nob”.
La palabra así formada, “snob”, se aplica hoy al que no poseyendo nobleza, elegancia y otros atributos semejantes, hace lo posible por parecerse a quienes cree que los tiene. En español, esnob.
Otra palabra de importación inglesa, ya incorporada a nuestro idioma, es tráiler, cuyo significado es “remolque de un camión”, o en lenguaje cinematográfico, “avance” (de una película).
Pero las que no existen en nuestra lengua, a pesar de la cantidad de veces que se oyen, son referi, apropiación indebida del vocablo inglés “referee”, árbitro en español, y amateur, vocablo francés usado indebidamente en el lenguaje deportivo en lugar de “no profesional” o aficionado, que es lo que significa en nuestro idioma.

Luque Maricarmen

No hay comentarios: